En la fotografía como en todas las cosas importantes de la vida, se parte de una misma mirada, de un mismo camino, de una misma dirección. Sean bienvenidos@s.
C u a r e n t e n a Desde hace ya varias semanas se decretó en España el estado de alarma a consecuencia de una pandemia global conocida por toda la sociedad. Aprovechando dicha situación, se desarrolla un relato de experiencia a través del objetivo de la cámara, en el cual se asocian dos conceptos que han estado presentes desde el comienzo de esta situación. Por una parte, la incertidumbre de un tiempo que no discurre, presente en la inmensidad del mar y el cielo, delimitado ambos espacios por una fina línea presente en el horizonte y por otra, el desarrollo inhóspito del día a día, ausente, extraño, obligado y reincidente en el que se comienza a valorar situaciones tan cotidianas, como la belleza que esconde una hoja, apunto de hundirse, aferrándose por continuar en la superficie.
Luis, 2020. Las dos retratos han sido realizados durante el periodo de confinamiento, ambos son a color y de formato vertical, pero la luz no es la misma. Es esa característica la que lo condiciona todo, días en los que te levantas y anímicamente valoras la situación y tu propio organismo considera que no es tan mala y otros en los que el Sol brilla por su ausencia, en los que todo se hace cuesta arriba y no consigues vislumbrar mas allá. Y eso que solo ha cambiado la luz, tal vez la próxima ocasión será cuestión de perspectiva.
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